Sara: María acabó la semana pasada con una cita del beato Juan XXIII, yo quiero comenzar hoy con otra frase de un Papa que está camino de los altares: (Pio XII, 9 abril de 1939)    “Así fue. Pero los hijos de las tinieblas, más astutos que los hijos de la luz, siguieron ladrando para establecer una sociedad sin Dios, con leyes antinaturales e inhumanas.”

El cardenal Bergoglio, hoy Su Santidad Francisco, escribió, el 22 de junio del 2010, sobre la legalización del llamado matrimonio homosexual: “No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política es la pretensión destructiva del plan de Dios. No se trata de un mero proyecto legislativo (éste es sólo el instrumento) sino una “movida” del padre de la mentira que pretende confundir y engañar a los hijos de Dios… estamos en esta guerra de Dios”. Si, combatamos los combates de la fe, bajo la protección de Jesús, María y José.

José: En verdad que en España no estamos en guerra sangrienta, pero si en una guerra satánica política, que comenzó con una constitución liberal, atea, divorcista, abortista… que ha destrozada los fundamentos de la España tradicional y católica.

Mateo: Es verdad, porque esa constitución ha levantado un sistema político que parte del fundamento de que la autoridad, la soberanía, es del pueblo. El único soberano es Cristo. La Monarquía tradicional de España era católica, como declaró el III Concilio de Toledo el año 589 y que los Reyes Católicos, restauran. Ante las Cortes reunidas en Santiago de Compostela, en 1520, Carlos V afirmó: “El imperio sólo procede de Dios”. Toda autoridad, todo poder contrario a la ley de Dios, es ilegítimo y antinatural.

María: Lo estamos viendo, España se está arruinando moral y económicamente, mientras los partidos políticos y sus familiares se están enriqueciendo y todo por apartarnos de la ley natural y divina, y establecer unas autonomías ruinosas que aceptan la mentira de la existencia de nacionalidades históricas en España.

Andrés: La Historia está ahí, para quien quiera estudiarla. El derecho natural ha sido aceptado libremente por los pueblos. Hoy se impone un derecho positivo por la coacción ideológica y la corrupción de las costumbres. Es absurdo pensar, que es justo todo lo que diga una mayoría. ¿Acaso el aborto es justo? Sin amor, el derecho se impone por la fuerza y el mismo poder político lo inculcará en cuanto no le convengan sus leyes. Lo estamos viendo. Hay que volver al amor a Dios, a la Patria, al prójimo y al derecho natural.

Rut: El principio revolucionario de que todos somos iguales está destrozando todas las instituciones humanas naturales. Hoy hasta los hijos dicen a sus padres que no los obedecen porque son iguales y no aceptan su autoridad. Y es verdad que todos somos iguales en esencia. Todos somos hijos de Dios, pero la naturaleza también enseña que somos, y es bueno y hasta necesario que así sea, diferentes en circunstancias y accidentes.

Pablo: Herodoto decía: “Quede la democracia para los enemigos”. Y yo me he preguntado muchas veces ¿Quién es el enemigo que ha sembrado esta cizaña en las naciones? Y la respuesta siempre es la misma: El demonio.

                                                                                                                                             Magdalena Presidenta