Es muy triste constatar que un gran porcentaje de jóvenes de españoles no saben nada de la religión y, si algo te dicen de religión, es una herejía o una aberración. Se relacionan con toda clase de personas, de cualquier parte del mundo, pero no tienen ninguna religión. No tienen ninguna relación con Dios. Lactancio y san Agustín decían que la religión es cierta “religación” del hombre con Dios. La religión es el conjunto de nuestras relaciones con Dios, como principio de donde procedemos y fin al que debemos ordenar nuestra vida: Participar en la Santa Misa, rezar el Rosario, las oraciones de la mañana y de la noche, dar limosna a los pobres, etc… son actos religiosos.

Wert-religion-escuela-opcion-politica_TINIMA20121216_0070_20Muchos de los que se dicen agnósticos o ateos, en realidad no lo son cabalmente. Es una confusión que quiere el Señor que pase pronto. Ante acontecimientos inesperados en sus vidas, se acuerdan de Dios y de los santos, sobre todo de la Virgen María. El deseo de relacionarse con Dios está grabado en el corazón del hombre y de la mujer. El hombre ha sido creado por Dios, quien no cesa de llamar al hombre hacia Él. Sólo en Dios encontraran los hombres satisfecho su deseo de felicidad y verdad, buscadas incesantemente por quienes viven en este mundo corrompido y corrupto.

Los hombres necesitamos la religión: tratar a Dios con ternura y devoción. Sólo en el trato íntimo y amoroso con nuestro Padre del cielo encuentran los hombres y las mujeres la felicidad que tanto ansían. En Dios encontramos la satisfacción de nuestras más nobles aspiraciones. Sólo la religión proporciona al hombre la plenitud de la verdad y del bien, la verdadera felicidad. Siempre será verdad lo que nos dice san Agustín: “Nos hiciste, Señor, para ti, y nuestro corazón estará inquieto hasta que descanse en ti.”

La religión puede ser natural, que es la que el hombre conoce con su razón, y puede practicar con las fuerzas de su voluntad. El fundamento de la religión natural está en el orden de la creación. Y religión sobrenatural es la que tiene un fundamento en el orden sobrenatural, revelado por Dios. Esta religión se conoce por la virtud de la fe y se practica con la voluntad, ayudada y fortalecida por la gracia de Dios.

También se suele dividir la religión en objetiva y subjetiva. La religión objetiva es el conjunto de las verdades reveladas por Dios en la Sagrada Escritura y en la Tradición divina, enseñadas por el Magisterio de la Iglesia. Religión subjetiva es la virtud que mueve al hombre a creer las verdades reveladas por Dios, a cumplir los Mandamientos y a dar culto a Dios por medio de la Liturgia.

P. Manuel Martínez Cano, mCR.