maria josefa150 aniversario del

nacimiento de

María Josefa Recio

1846 – 1996

Fundadora de la Congregación de

Hermanas Hospitalarias del Sagrado

Corazón de Jesús

 

“Tengan mucha caridad y paciencia con

las enfermas, pues no comprenden muchas

veces nada de lo que hacen y dicen”

(Del “Testamento espiritual” de María Josefa Recio)

Oración

Para pedir gracias por intercesión

de la sierva de dios María Josefa Recio Martín

Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, te damos gracias por la caridad y humildad con que enriqueciste a tu sierva fiel María Josefa Recio, te pedimos esas mismas virtudes, y, si te agrada glorificarla, concédenos por su intercesión la gracia que suplicamos. Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo.

(Con licencia eclesiástica)

Datos Biográficos

María Josefa Recio Martín nace en Granada (España), el 19 de marzo de 1846. Muy joven contrae matrimonio y a la edad de 33 años queda viuda y sin descendencia. El año 1880, con su amiga María Angustias Giménez, sale de su tierra natal y se instala en Ciempozuelos (Madrid). Bajo la dirección del Beato Benito Menni, OH, inician la vida religiosa que culmina con la fundación de la Congregación de Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, cuyo fin específico es la asistencia a enfermos mentales.

La predilección por la vida sencilla, humilde y el amor a Dios y al prójimo, hecho servicio en el necesitado, llenan su existencia.

Muere el 30 de octubre de 1883 en Ciempozuelos (Madrid) siendo ejemplo de caridad heroica, y quienes la conocieron dan testimonio de su santidad.

Causa de canonización

En este año 1996 se cumple el 150 aniversario del nacimiento de la Sierva de Dios María Josefa Recio. Apenas nos separan cinco años desde que se inició el Proceso Diocesano, y tan sólo tres – 8 de enero 1993 – desde que se promulgó el Decreto que declaraba válido y aprobado dicho Proceso Diocesano.

Tal decreto nos abría el camino y aportaba los medios en orden a la exposición de las pruebas de la santidad de María Josefa, desde su fama como tal. Con ello se tenía que probar en detalle la heroicidad de sus virtudes, valiéndonos de la documentación canónica aportada por el mismo Proceso Diocesano.

Durante estos tres años, una primera etapa ha estado dedicada a la recopilación y ordenación de las fuentes histórico-biográficas; trabajo básico para la aplicación de la santidad, que fue realizado por D. Vicente Cárcel. No se puede cortar un traje a medida sin tener las medidas exactas del modelo. En nuestro caso, la santidad es el traje, y las medidas, los hechos biográficos y actitudes de la Sierva de Dios María Josefa, con las que podemos reproducir adecuadamente la figura perfecta aplicándole cada una de las virtudes.

Nos hallamos en la segunda etapa, la de concretizar y aplicar los datos estudiando cada una de las virtudes. El camino a recorrer es largo, complejo, delicado y escrupuloso: no basta ni sirve afirmar en general que es santa, sino que es imprescindible aplicar los diversos y más meticulosos aspectos de su vida a cada una de las virtudes, corroborados – lo propio de la fama de santidad – con los testimonios de los que los refrendan .

La Causa, pues, sigue su camino en desarrollo y en proyección, sin duda, positiva; diligencia de ejecución concretizada en unos, pero responsabilidad de todos, en particular de los más interesados, en cuanto que todos debemos secundar con nuestra aportación intercesora de lo Alto.

Félix Lizaso Berruete, O.H.

Postulador

 

 

 

 

 

 

Su caridad con las enfermas

  • Cuando comenzaron a ingresar enfermas (en la primera casa de la Congregación), si algo había en casa, mandaba que fueran ellas las primeras socorridas.

(Sor María de la Purificación Aberásturi)

  • Era la primera en el servicio a las enfermas y se adelantaba para encargarse de lo más penoso. Puesta de rodillas, les daba de comer con espíritu de fe y con una veneración que edificaba a todos.

(De la biografía)

  • Para las enfermas era una verdadera madre. En cuanto estaba de su parte, les prodigaba hasta el más pequeño alivio, y hubiera hecho cualquier sacrificio, por penoso que fuese, para que las enfermas estuviesen con alguna comodidad.

(Sor Cruz Cabeza)

  • Acudía diariamente a visitar a las enfermas y a darles la comida. A todas daba aliento y consuelo en sus penas y aflicciones; a todas trataba con mucha amabilidad y cariño, cual verdadera madre, y ellas se mostraban muy satisfechas cuando María Josefa les servía la comida.

(Sor María Lorza)

  • Era para las enfermas una verdadera. madre en lo espiritual y en lo temporal.

(Sor María del Rosario Zudaire)

  • Su caridad fue sin límites para con las enfermas.

(Sor Teresa de Jesús Gener)

 

Gracias recibidas

Soy estudiante de Administración Turística. Un día, alguien me regaló la novena de María Josefa Recio pero no le di importancia; pasaron los años y cuando estaba arreglando unas cosas, la recogí y la guardé debajo de la almohada, hasta que un día que me encontraba con muchos problemas y deprimida la leí y me sentí libre y tranquila.

(C. Pimienta Colombia)

Me encontraba con graves dificultades financieras que sólo podía resolver, en parte, con la venta de un inmueble, pero no se preveía ningún comprador. Esta situación me producía gran sufrimiento y mi salud comenzó a resentirse.

Una persona amiga que conoció mi aflicción, comenzó, con fe y confianza, a encomendar mi caso a la Madre María Josefa Recio, pidiéndole me ayudase a resolver el problema y prometiéndole que si obtenía esta gracia lo haría público a la mayor brevedad.

En esos mismos días apareció alguien interesado en la compra del inmueble. Pronto iniciamos los trámites de venta con grande esperanza. Expreso mi agradecimiento por esta gracia obtenida y creo en la santidad de María Josefa Recio.

(F dos Santos Costa Portugal)

Glorifico a Dios por medio de María Josefa Recio. Por su intercesión, Alain, ha encontrado trabajo inesperadamente gracias a las oraciones hechas por las Hnas. Hospitalarias. Le doy gracias de todo corazón.

(M. Montabat – Francia)

Por medio de esta carta quiero agradecerte María Josefa Recio por haberme concedido la gracia que te pedí. Seguiré rezando siempre tu oración, deseando recibir siempre tu bendición para mi familia y para mí.

(R. Raggio – Argentina)

Álvaro García Barajas tuvo un accidente de tráfico muy grave y quedó en coma. Al enterarse su tío le encomendó a la Madre María Josefa Recio. Álvaro estuvo durante 7 días en la UVI, muy grave. En la actualidad está totalmente recuperado.

Su tío, Daniel Barajas, atribuye esta curación a la Madre Fundadora y en agradecimiento nos envía 5.000 pesetas para la causa de canonización.

(Daniel Barajas España)