«Has de saber, hija mía, que mis caudales y tesoros están cercados de espinas, basta determinarse a soportar las primeras punzadas, para que todo se trueque en dulzuras».
Santa Brígida.
«Abraza al Dios Amor y abraza al Dios del amor».
San Agustín.
«Cuando se ama no se sufre y, si se sufre, hasta se ama el mismo sufrimiento».
San Agustín.
«No morirá de mala muerte el que oye devotamente y con perseverancia la Santa Misa».
San Agustín.
«Tened gran cuidado en predicar la verdad de tal modo que, si acaso hay entre los oyentes un hereje, le sirva de ejemplo de caridad y moderación cristianas. No uséis de palabras duras ni mostréis desprecio por sus errores».
San Ignacio de Loyola.
«La Eucaristía y la Virgen son las dos columnas que han de sostener nuestras vidas».
San Juan Bosco.
«Procurad siempre vivir en la amistad de Dios».
San Juan Bosco.
«Cuando no tenéis el amor de Dios en vosotros, sois muy pobres. Sois como un árbol sin flores y sin frutos».
Santo Cura de Ars.
Basta amar al Santo de los Santos, para llegar a ser santos.
Santa Margarita María Alacoque
Como el niño está obligado a hacerse hombre, el cristiano está obligado a ser santo.
- José Rivera
El Calvario es el monte de los santos, pero de allí se pasa a otro monte, que se llama Tabor.
San Pío de Pieltrecina
El camino de la propia santificación es el santo misterio de la cruz.
Madre Maravillas de Jesús
El camino de nuestra santificación personal pasa, cotidianamente, por la Cruz: no es desgraciado este camino, porque Cristo mismo nos ayuda y con Él no cabe la tristeza.
San Josemaría Escrivá de Balaguer
En lugar de desanimarme, me he dicho a mí misma: Dios no puede inspirar deseos irrealizables; por lo tanto, a pesar de mi pequeñez, puedo aspirar a la santidad.
Santa Teresita de Lisieux
