Pablo

“Auto-demolición de la Iglesia”

«Auto-demolición de la Iglesia» que el Papa Beato Pablo VI denunció proféticamente hace más de 40 años. Por la fe, sabemos que Dios de algún modo librará a Su Iglesia de esta crisis gravísima. Sin embargo, no debemos caer en un «providencialismo» exagerado. Normalmente Dios actúa por medio de las causas segundas. Los fieles cristianos no carecemos de responsabilidades de cara a la actual crisis de la Iglesia. ¿Qué podemos hacer? Varias cosas, pero la primera es rezar por el Papa, los Obispos, los sacerdotes y todo el Pueblo de Dios, a fin de que el Señor nos conceda a todos conservar y promover la verdadera fe católica y no naufragar en esta dura prueba. (Ing. Daniel Iglesias Grèzes – INFOCATÓLICA)

Falta de autoridad

Creo que dejar que un sacerdote o un obispo diga cosas que socavan o arruinan el depósito de la fe, sin interpelarle, es una falta grave. Como mínimo, hay que interpelarle y pedirle que explique las razones de sus comentarios, sin dudar en exigirle que los reformule de manera conforme a la doctrina y a la enseñanza secular de la Iglesia. No podemos dejar que la gente diga o escriba cualquier cosa sobre la doctrina, la moral, lo que actualmente desorienta a los cristianos y crea una gran confusión sobre lo que Cristo y la Iglesia siempre han enseñado. (Cardenal Robert Sarah)

Progresismo católico

¿Cree usted, entonces, que hay un progresismo católico?

-Obviamente. Claro que lo hay. Hay una tendencia del catolicismo cuya convicción es el marxismo cultural. Y digo convicción, porque es mucho más que una afición o un hobby. Es toda una forma de conformarse con el mundo. Es como una gran sombra de catolicismo, un simulacro, un arte de imitación, una impostura teológica. Una sombra que acompaña a la Iglesia, que hay que iluminar con el sol que viene de lo alto, que es la sana doctrina bíblicotradicional. (Alonso Gracián – INFOCATÓLICA)

La alcaldesa de Barcelona

La alcaldesa centrífuga puso en marcha su macedonia ideológica y se le ocurrió una gran idea: suprimir la barcelonesa plaza de la Hispanidad. Porque está claro, la hispanidad es fascista.

Colau es un producto de la LODE, quizás de la LOGSE. Piensa aproximadamente así: los españoles perpetramos el mayor genocidio de la historia en Iberoamérica, saqueamos su oro y violamos a sus mujeres. Y lo que es peor: les impusimos el credo cristiano gracias al cual dejaron de asesinarse ritualmente, como es el deber de toda encomiable religión natural. Por lo tanto, la Hispanidad debe ser erradicada.

¿Puede alguien ser tan necio como para pensar -y hacer- según esta chorrada? Al parecer, sí. Últimamente muchos. Curiosamente, sigue existiendo la raza hispana, mientras que nadie ha oído hablar de la raza anglo-india o franco-magrebí. Pero la centrífuga Colau no se guía ni por la historia, ni por la razón, ni por argumentos: sólo por sus prejuicios. Conste que la culpa no es suya, sino de los barceloneses que le han votado. (Eulogio López – HISPANIDAD)

“Consecuencias  morales”

Una vez explicado que el ser humano es una «unidad cuerpo-alma cuya identidad sexual innata se refleja en la biología de la persona, debe quedar claro que ninguna intervención quirúrgica, hormonal u otra realizada en el cuerpo es capaz de alterar la identidad sexual innata».

La utilización de niños por parte del lobby LGTB es cada vez más común. Por ejemplo, el número de enero de National Geographic dedicó su portada a un niño que decía ser niña.

Estas prácticas tienen «consecuencias morales» en el «orden práctico» pues las personas que se someten a ellas «actúan en contra de su propio bien». Por ello, el texto alerta que los actos que se enumeran a continuación «son perjudiciales para el bien de la persona y nunca pueden llevarse a cabo legítimamente, aprobados o promocionados»:

«La administración de hormonas sexuales cruzadas como un medio de transición de género en sí mismas, o en preparación para la cirugía de reasignación de sexo; la administración de hormonas bloqueadoras de la pubertad a los niños como medio de transición debido a la disforia de género u otros problemas de identidad sexual; y la adopción de comportamientos, vestimentas, manierismos, nombres o pronombres típicos del sexo opuesto con afirmaciones de ser (y por lo tanto exige ser tratado como) una persona del sexo opuesto”. (National Catholic Biothics Center)

 

Una vida de virtud heroica

San Juan Pablo II, presentó un estándar más alto, convocando a los jóvenes a arriesgarse a la aventura de una vida de virtud heroica. Él sabía que fallarían de vez en cuando, lo mismo que él. Pero eso no era excusa para bajar las expectativas. Más bien, era una razón para buscar la misericordia divina y volver a encontrar la verdad de Dios: arrepentirse, confesarse, ser perdonado, y luego intentar de nuevo, con la ayuda de la gracia, crecer en la santidad que es la vocación bautismal de todos. Nunca, nunca conformarse con nada menos que la grandeza espiritual y moral que la gracia de Dios hace posible en nuestra vida: ése fue el desafío de San Juan Pablo II. Muchos jóvenes lo encontraron irresistible. (Weigel – INFOCATÓLICA)

20  Pudor y castidad

Teóricamente se afirma con frecuencia que laicos y religiosos están llamados a la santidad. Nadie lo niega: el Concilio Vaticano II insistió muy especialmente en la vocación universal a la santidad (LG cp. V). Pero prácticamente son muy pocos los que, sobre todo en referencia a los laicos, se atreven a indicar los medios precisos para llegar a la santidad en la vida laical. Más bien hablan y actúan como si a los laicos les permitieran, más aún, les recomendaran que, siendo seglares, vivan como los seculares, es decir, mundanicen sus modos de vida para ser fieles a su vocación, evitando diferenciarse de sus conciudadanos. Vengamos a ver estos principios falsos aplicados al tema del pudor. (José María Iraburu)

Multas

En Madrid se ha publicado una Ley llamada de “Protección integral contra la LGTBIfobia y la discriminación por razón de orientación e identidad sexual en la Comunidad de Madrid”. En ella, aprobada por unanimidad (tan sólo hubo dos diputados que se ausentaron para no traicionar su conciencia), se establece:

Artículo 70. Son infracciones muy graves: c) La promoción y realización de terapias de aversión o conversión con la finalidad de modificar la orientación sexual o identidad de género de una persona. Para la comisión de esta infracción será irrelevante el consentimiento prestado por la persona sometida a tales terapias.

Artículo 72.- Sanciones. 3.- Las infracciones muy graves serán sancionadas con multa de 20.000 hasta 45.000 euros. En pocas palabras, si un médico intenta ayudar a un paciente que le pide ayuda para salir de la homosexualidad, y recordemos que cada día hay más personas en el mundo y en España que lo están consiguiendo, le cae un multazo que lo deja doblado. Al médico se le impide el libre ejercicio de su profesión, porque la ideología es más importante que la realidad. Un amigo mío, médico en Madrid, me contaba que hablando con sus colegas, no le podían creer, por lo que la discusión terminaba pidiéndoles su email y mandándoles la Ley. (Pedro Trevijano Etcheverría – INFOCATÓLICA)

Acaba destruyendo a la juventud

Cualquier norma que emana de un poder, constituye «normalidad», aunque sea contra la naturaleza. Para entenderlo sociológicamente, podemos decir que hay una especie de ley que siempre se cumple: lo que se presenta como una educación para la salud y la higiene de los jóvenes (desde el estado revolucionario), acaba destruyendo a la juventud. La promoción de la educación sexual y anticonceptiva, se justificó diciendo que así habría menos abortos. (Javier Barraycoa – AVE MARÍA)