pensar-657x360Dios no te castiga, Él está sufriendo contigo en los malos momentos. Uno, en la adversidad, puede crecer como persona y como creyente, puede dar un giro a sus planteamientos de vida y encontrar un filón de fuerza, de proyectos y de alegría.

Mª Carmen Domínguez, madre de Olga Bejano

El concepto de memoria histórica es un proyecto sectario, un  intento de imponer la falsificación y ponerse de un bando. Sólo puede traer divisiones. Es un intento de legislar la Historia.

Stanley G. Payne, historiador

Lo que constituye la única justificación del poder político, del Gobierno, es la protección de las libertades, garantizando la seguridad que da el derecho.

Dalmacio Negro

No hay palabras para distinguir la grandeza de la Virgen María: es mi madre, es la mujer más bella, es mi morenita, mi madrecita, mi mamaíta, mi todo, mi guía, mi madre.

Eduardo Verástegui, actor

El problema del despotismo de los menores comienza en casa. Los padres no ponen límites a sus hijos y tampoco permiten que nadie se los ponga. Hay que recuperar la autoridad. Mantener el respeto de los mayores y transmitir conocimientos y valores no supone un retroceso, sino un avance en la educación.

Inmaculada Suárez, Defensora del profesor

Los resultados electorales no significan un criterio objetivo acerca de la gestión del Gobierno. El pueblo se puede equivocar. La idea de que el pueblo tiene razón es una ficción útil para pensar la democracia desde la ideología democrática. La democracia está poblada de contradicciones.

Felipe Giménez Pérez

Por la misma razón, la división de poderes desaparece. Todos tienen un solo dueño. Los partidos políticos. Ellos nombran los máximos órganos judiciales, al eje del poder final, a los magistrados de los tribunales de Justicia. El partido todo lo nombra y revoca, controlando directamente el poder judicial.

Álvaro Rodríguez Valdés

Desde el momento de mi concepción he sido un ser humano odiado: por mis padres biológicos, por los doctores que intentaron matarme, por las personas a las que hoy grito que el aborto es un terrible asesinato y que soy un testigo singular de ello (…) He perdonado a mis padres, especialmente a mi madre biológica, porque soy cristiana, y un seguidor de Cristo tiene el deber de perdonar con todo el corazón.

Gianna  Jessen