“Seamos misioneros de la misericordia de Dios, que siempre nos perdona, nos espera siempre y nos ama tanto”.
El papa Francisco
¡Oh, cuanto me aflige el sacrificio que estos pobres (sus padres) hacen para separarse de mí! Pero se me ha asegurado que Dios me llama, y voy seguro».
San Daniel Comboni
«¿No tengo harto que llorar que no sé si me he de salvar?».
San Luís Beltrán
«He sufrido en mi vida todo lo que una persona humana puede sufrir. Pero todo ha sido por amor a Dios».
Santa María Francisca de las Cinco Llagas
«En el cielo me uniré a los que me esperan y, desde allí, pediremos y lograremos el triunfo de la fe en España».
Beato José María Poyatos Ruiz
«¡Señor, si tienes necesidad de un pobre, heme aquí! ¡Si tienes necesidad de un loco, heme aquí! Que piensen lo que quieran, que me miren como a un loco, poco me importa, yo soy de Jesucristo».
Beato Antonio Chevrier
«Estoy contento, es mi cruz y sin la cruz no se va al paraíso».
Beato Paolo Manna
