Padre Manuel Martínez Cano mCR.
El Niño Jesús nació en Belén y, cuando se cumplieron los ocho días, lo circuncidaron; le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción. A los cuarenta días de su nacimiento, María y José presentaron al Niño en el Templo de acuerdo con lo escrito en la Ley del Señor: “todo varón primogénito será consagrado al Señor”.
Vivía en Jerusalén un nombre justo, a quien el Espíritu Santo le había revelado que no moriría sin haber visto al Mesías del Señor. Cuando José y María entraban en el Templo con Jesús, Simeón tomo al Niño en sus brazos y bendijo a Dios diciendo: “Ahora Señor, según tu promesa puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quién has presentado ante todos los pueblos. Luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel” (Lc 2, 29-32). “será como un signo de contradicción (Lc 2, 35). Sigue leyendo
Acción social y caritativa. En los años cuarenta-cincuenta, numerosos sacerdotes y seglares viven simultáneamente un esfuerzo ardiente de renovación interior y una vibrante inquietud por la justicia social. Prevalece el estilo de la entrega personal a obras que aportaban soluciones inmediatas, más que el de «reclamaciones a la sociedad». En 1952, por ejemplo, la Iglesia animaba 26 sociedades benéficas constructoras de viviendas; en los años sesenta se pone en marcha la campaña contra el hambre en el mundo. Es de justicia que la historia registre la corriente continua de cerca de veinte mil religiosas y religiosos entregados a cuidar a los menesterosos, enfermos o desvalidos, logrando en algunos casos formar con los que parecerían «desechos de la sociedad» unos hogares llenos de alegría incomparable (24). En el plano de la organización pastoral: «Cáritas» se concibe como la realización del deber de ayuda y comunicación de bienes que obliga a toda la comunidad cristiana (25); se establecen centros y semanas de estudios sociales (26); desde 1950 se acentúa el apostolado obrero especializado (27). La iluminación pastoral acompaña la andadura de la situación económica:
*La democracia es muerte consensuada: aborto, eutanasia…
*Las democracias imperantes son paganas. Corrompen a los pueblos y a las almas con estructuras de pecado.
*Jesús confía en ti. Confía totalmente en Jesús. te salvarás y salvarás otras almas.