Ateísmo-Hoy
José Guerra Campos
Obispo de Cuenca
Fe Católica-Ediciones, Madrid, 1978
- Responsabilidad del ateo ante Dios.
Por último -y en este punto falla mucho el llamado diálogo con los ateos- la Iglesia no puede dejar de recordar al ateo su propia, intransferible y principal responsabilidad. Nadie puede cerrar los ojos a la luz, y menos con la excusa de que la luz está entre tinieblas. El ateo es el primer obligado a poner las condiciones adecuadas para buscar, para invocar, para responder a Dios.