Papa Francisco
Al final de nuestra vida, seremos juzgados sobre el amor, es decir sobre nuestro compromiso concreto de amar y de servir a Jesús en nuestros hermanos más pequeños y necesitados. Ese mendigo, ese que tiende la mano es Jesús; ese enfermo que debo visitar es Jesús; ese prisionero es Jesús; ese hambriento es Jesús. Pensemos esto. Jesús vendrá al final de los tiempos para juzgar a todas las naciones, pero él viene a nosotros todos los días, de muchas maneras y nos pide que le acojamos. Que la Virgen María nos ayude a encontrarle y a recibirle en su Palabra y en la Eucaristía, y al mismo tiempo en nuestros hermanos y hermanas que sufren el hambre, la enfermedad, la opresión, la injusticia. Que nuestros corazones puedan acogerle en el hoy de nuestra vida, para que seamos acogidos por él en la eternidad de su Reino de luz y de paz).
Cardenal Juan Sandoval Íñiguez Sigue leyendo
En definitiva, las siguientes palabras del autor sintetizan su punto de vista sobre la cuestión: “La democracia se está reduciendo a la corrección política definida y sancionada por los gobiernos con el asentimiento activo o pasivo de los gobernados infantilizados por la propaganda masiva, la educación en manos de los políticos y las costumbres del estatismo, entre ellas el clásico panem et circenses”. (Alfredo Crespo Alcázar – RAZÓN ESPAÑOLA)
*Dios dice por boca del profeta Isaías: “Yo soy Dios, y no hay otro; no hay otro dios como Yo… Escuchadme, los desanimados, que os creéis lejos de la victoria, no está lejos; mi salvación no tardará”. A combatir los nobles combates de la fe.
Nuestro Estado social de derecho encuentra su garantía en una doble vertiente: de un lado, en la naturaleza permanente e inmutable de sus Principios, unida al carácter de superley de nuestras Leyes Fundamentales, que sólo con determinadas condiciones pueden ser modificadas; de otro lado, en la suprema garantía del cumplimiento de la Ley por una Justicia independiente. En el primer aspecto, el papel del Consejo Nacional es decisivo. En el segundo, la garantía del imperio de la Ley está fijada de modo terminante por el artículo 17 del Fuero de los Españoles, que establece el derecho a la seguridad jurídica. Todos los órganos del Estado
Señor Jesús, que para salvar a la humanidad entregaste tu vida en la Cruz; por el ardiente celo apostólico que infundiste en el corazón de tu sierva, la Beata Dolores Sopeña, por aquellos continuos trabajos y sufrimientos que abrazó gozosa por la salvación de los hombres, te pedimos por su intercesión nos concedas el favor que deseamos alcanzar, y dígnate otorgarnos la gracia de su canonización, si tal es tu santa voluntad. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.