El Párroco
* La norma moral objetiva es la Ley de Dios. La moral autónoma, que predican y practican los melindrones de la novísima conciencia, ha salido del infierno.
* La naturaleza humana, rechaza como un mal, al dolor, el sufrimiento. Vistos a la luz sobrenatural, es el gran don que Dios nos concede para nuestra santificación.
* El mundo pagano es un mundo fatalista. El mundo cristiano es un mundo providencialista: Dios nos ha creado, nos ama y quiere salvarnos eternamente.
* Salmo 14.1: «Dice el necio para sí: «No hay Dios». La Sagrada Escritura afirma que se necesita ser necio para negar la existencia de Dios. Para decir que Dios es el Hombre, se necesita estar endemoniado.