María del Carmen González Valerio y Sáenz de Heredia, nació en Madrid el 14 de marzo de 1930. En el seno de una familia profundamente cristiana siendo la segunda de cinco hermanos. Sus padres la consagraron a la Virgen antes de nacer y después se la ofrecieron en diversas peregrinaciones en sus Santuarios principales.
Tuvo prisa el Señor en hacerla suya disponiendo que recibiera el Santo Bautismo a las pocas horas de nacer. A los dos años recibió el Sacramento de la Confirmación y ya desde entonces se notaban en ella síntomas de una vida interior inexplicable a su edad, si no es por obra de la Gracia. Con ansias incontenidas por recibir a Jesús-Eucaristía, se preparó con entusiasmo, seriedad y un interés impropio de su corta edad, a su Primera Comunión que hizo a los seis años, el 27 de junio de 1936.
Para ella TODO se encontraba en «Jesús». Tenía mucha devoción a su Corazón y gastaba sus ahorros en propagarla… Sentía gran repugnancia hacia la mentira. Era muy agradecida a cualquier servicio que se le hiciera. Todos se sentían felices a su lado. La fe alumbraba toda su vida y ya desde muy pequeña tenía muy claro el concepto de la santidad, siguiendo el ejemplo de Cristo.
Sus virtudes características fueron: La pureza y la caridad. De la primera dio pruebas constantes defendiéndola a cualquier precio. La segunda la practicaba con los que la rodeaban y con los desconocidos que estaban lejos, dando sus mejores cosas; y, sobre todo, dándose a sí misma en la entrega total que de su vida hizo a Dios por la salvación de los que habían fusilado a su padre el 29 de agosto de 1936. Fue el Jueves Santo, 6 de abril de 1939, después de la Comunión. El Señor aceptó su ofrenda victimal y muere en la cruz el 17 de julio de 1939, después de sufrir sin una queja, obediente a todos y repitiendo a los nombres de Jesús, María y José. Habiendo predicho el día de su entrada en el Ciclo y que la Virgen vendría a buscarla. Tenía nueve años y ya había llenado una gran vida sobrenatural.
Un día, en el colegio, después de confesar a todas las niñas, el padre que las confesó dijo: «Esta niña está llena de Espíritu Santo».
Se ruega a quienes obtengan gracias, por la intercesión de Mari Carmen, que comuniquen a la Asociación de Amigos de la Causa de Beatificación de Mari Carmen, calle Sagasta, 28-2º 28004 Madrid. http://www.maricarmengv.info, maricarmengonzalezvalerio@gmail.com
Con censura eclesiástica.
tengo mucha devoción a esta niña y la rezo y hablo mucho . Los dos favores que la he pedido se me están concediendo . Uno de ellos fue trabajo para mi hijo y enseguida encontró trabajo y le acaban de hacer fijo tras pasar el mes de prueba. El otro es la sanacion de una nieta que nació con una afección de corazón muy gorda y está mejorando mucho .