San Ignacio dice que hemos sido creados para alabar, hacer reverencia y servir a Dios y mediante esto salvar el alma. Sí, el alma anhela la salvación eterna y San Agustín, dice: “Nos hiciste Señor para Ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti”. Salvar el alma es acabar la vida terrena en gracia de Dios para gozar de la eterna bienaventuranza del cielo. Sigue leyendo
Salvar el alma
15 jueves Dic 2016
Posted P. Manuel Martínez Cano
in