Yo, ¿para qué nací? Para salvarme.
Que tengo que morir es infalible;
dejar de ver a Dios y condenarme
triste cosa será, pero posible.
Posible, ¿y río, y duermo, y quiero holgarme?
Posible, ¿y tengo amor a lo visible?
¿Qué hago, en qué me ocupo, en qué me encanto?
Loco debo de ser pues no soy santo.