

09 sábado Jun 2018
Posted in Oraciones


09 sábado Jun 2018
Posted in Artículos - Contracorriente
La Virgen de la Merced fue llamada por Su Santidad el papa San Juan Pablo II en su primera visita al Perú en 1985, “La Estrella de la Fe y de la evangelización”.
El nombre “María de la Merced” es un título teológico, que revela una faceta importante del misterio de María, entendida como co-redentora junto a su Hijo, el Redentor. Es un título vinculado a la vida y obra de san Pedro Nolasco, que más que fundador autónomo de una familia religiosa aparece como devoto de María y promotor de la obra de Merced de la Virgen María mediante la redención de cautivos.
En los primeros documentos, los redentores de cautivos aparecen como Orden de Santa Eulalia (por el nombre de la casa donde residían, en Barcelona) o Redención de cautivos (por su tarea específica). Pero pronto, por impulso del pueblo ellos empiezan a llamarse “Orden u obra de Santa María de la Merced, de la Redención de cautivos”.
Con los mercedarios iba siempre María de la Merced. El término primigenio, en singular, se convirtió en forma plural: Nuestra Señora de las Mercedes. Esto sucede por el año 1536, en Perú. El significado de Merced se amplía: el pueblo lo hace sinónimo de favor o gracia e invoca a María con el expresivo título de Virgen de las Mercedes.
Está comprobado que en el primer viaje de Cristóbal Colón no fue ningún sacerdote ni religioso. La llegada de misioneros y religiosos al nuevo continente se produjo en el segundo viaje (1493).
Una de las preocupaciones de la Monarquía Católica al irrumpir el Nuevo Mundo en el teatro histórico de la España del siglo XVI, fue la evangelización de los territorios recientemente descubiertos por el almirante Colón en octubre de 1492. Los Reyes Católicos eligen a la Orden Mercedaria junto con franciscanos, dominicos y agustinos, para que evangelizaran las Indias Occidentales. Los reyes de España pidieron a estas órdenes que buscasen en sus comunidades a los religiosos más aptos y de buena voluntad que quisiesen ir a la conversión de no cristianos, a fin de enviarlos, al menos por diez años, al nuevo continente. Así, la historia de la Virgen de la Merced en América se inicia unos pocos años después del descubrimiento, cuando Cristóbal Colón desembarcó en la isla de la Española, hoy República Dominicana.
09 sábado Jun 2018
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Isabel
“Quien habla de organización habla de oligarquía”, decía el propio Michels. Una poderosa razón por la que la democracia no puede ser tan igualitaria como prometen y pretenden la democracia «social», la democracia «económica», la «justicia social», etc., fórmulas de la demagogia inherente a la revolución permanente cuyo deus ex machina es el Estado, el deus mortalis de Thomas Hobbes. El Estado, decía Nikolaus Koch, es “Una revolución permanente y explosiva”, intensificada en el caso del Estado Democrático. Como dijo Tácito “el poder (humano) no es estable cuando es ilimitado”. (Dalmacio Negro – RAZÓN ESPAÑOLA)
Ateniéndonos, pues, al aspecto histórico de la obra de Soloviev y juzgándolo a la luz de los acontecimientos posteriores, se impone la sensación de su fracaso. Al analizar, empero, su concepto de la Iglesia y su manera de fundamentarlo en el misterio mismo de la Trinidad, es imposible, ante tal derroche de poderío intelectual, no sentirnos presa de la más profunda admiración. (Osvaldo Lira – VERBO)
Aquí todavía se deben poner más exigencias en fuerza del amor que en la propia familia, si falta la unión natural, si el número de pacientes es muy grande, si son pacientes en su mayoría que por su disposición y situación presente repugnan más que atraen. Aquí se mostrará más claramente que en otra parte siempre de nuevo que el poder psíquico natural no basta para dichas obras, sino que se debe sacar del poder y del amor de Cristo. Y donde él está, uno no se detendrá siguiendo sólo su disposición natural de servir a la humanidad natural, sino que siempre trabajará por el fin sobrenatural para ganar estos hombres para Dios.
Por consiguiente, un mundo sagrado, un mundo santificado, un mundo transfigurado en Cristo es una imposibilidad dentro del luteranismo. Es probable que la tristeza del mundo protestante, su falta de alegría y espontaneidad, su temor frente a la belleza humana y natural, mane de esta negativa de la bondad de las cosas que el Dios bueno ha creado. (Frederick D. Wilhelmsen – VERBO)
En octubre de 1995 muchos pueblos y ciudades del noroeste de México, ciudades turísticas, comprobaron cómo sus alegres músicas, sus cálidas noches tropicales destinadas al placer, se veían convertidas en montañas de escombros, llenas de cadáveres, debido a fuertes terremotos. (Jaime Solá Grané)
A los mismos pastorcitos, el 13 de mayo de 1917, la Virgen les habló de “sacrificios”, “sufrimientos”, “reparación de los pecados”, “conversión de los pecadores”, “blasfemias”, “ofensas”, y les enseñó que la oración diaria del Rosario llevaría a obtener “la paz para el mundo”, enseñanza reiterada en la aparición del 13 de julio siguiente: “Rezad el Rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra” (de la Primera Guerra Mundial). (Ricardo Dip – Verbo)
Mas la verdadera educación se propone la formación de la persona humana en orden a su fin último y al bien de las sociedades, de las que el hombre es miembro y en cuyas responsabilidades tornará parte una vez llegado a la adolescencia… Declara igualmente el sagrado Concilio que los niños y los adolescentes tienen derecho a que se les estimule a apreciar con recta conciencia los valores morales y a prestarles su adhesión personal y también a que se les estimule a conocer y amar más a Dios… (Mn. José Ricart Torrens – CATECISMO SOCIAL)
09 sábado Jun 2018
Posted in Sabaticas
El Consiliario
* Los viejos sabelotodo de este mundo, separaron la teología moral de la dogmática, reduciendo la religión a moralidad. Los nuevos sabelotodo han suprimido la moral, dando al hombre plena libertad. Para matar inocentes, por ejemplo.
* Fultel de Colanges decía que, cuando «La historia es mal conocida, divide a los hombres, si se le conoce bien, puede unirlos». Así se entiende perfectamente la ley de «memorias históricas» democratistas que imperan en todas las imaginaciones. Sólo la verdad une y hace libres a los hombres.
* A veces, decimos: «No somos nada». Y es verdad, porque lo que somos, se lo debemos a Dios. Es tremendo entender que somos menos que nada (La nada es no ser), porque la nada no puede pecar, no puede ofender a Dios, y nosotros si podemos ofender a Dios, nuestro Padre Eterno y Todopoderoso. No somos todos esas cosa fantásticas que nos imaginamos. ¡Somos hijos de Dios! ¡Vivamos como hijos de Dios!