Antes de contar nada quiero deja claro que lo que yo cuento aquí es una experiencia personal, y que la iglesia aún no se ha pronunciado sobre estas apariciones.
Quince días antes de ir a Medjugorje, me tuvieron que operar de urgencia. Los médicos después de muchos calmantes me quitaron el dolor, y me dijeron que si no me volvía el dolor me programarían la operación para más adelante. Yo hice un ruego a la Virgen y le pedí que si me quería a su lado en Medjugorje me diera un poco de dolor, y ella como Madre que es, escuchó mi ruego y al cabo de una hora ya me estaban operando. Sigue leyendo