El tiempo transcurrido no ha envejecido nuestro Movimiento ni nuestra doctrina. Ha pasado un cuarto de siglo, pero nuestra doctrina aparece hoy tan lozana como aquellos primeros días, cuando tantas veces costaba la muerte el proclamarla y el sacar y vender nuestro periódico.
(23-III-1960: Audiencia. —En el XXV Aniversario del periódico “Arriba”.)
Unidad nacional y justicia social
Vosotros comprendéis mejor la necesidad de una política de Unidad Nacional, de Justicia Social, de comprensión mutua; una política que defienda y estimule nuestros bienes espirituales, que haga que en el futuro no puedan ya enfrentarse españoles contra españoles y, lo que es más importante todavía, que, en nuestro territorio, en los pueblos y en las ciudades, no pueda ondear jamás la bandera del comunismo.
«Mirad que os mando como ovejas entre lobos; por eso, sed sagaces como serpientes y sencillos como palomas. Pero no os fieis de la gente, porque os entregarán a los tribunales, os azotarán en las sinagogas y os harán comparecer ante gobernadores y reyes, por mi causa; así daréis testimonio ante ellos y ante los gentiles. Cuando os arresten, no os preocupéis de lo que vais a decir o de cómo lo diréis: en su momento se os sugerirá lo que tenéis que decir; no seréis vosotros los que habléis, el Espíritu de vuestro Padre hablará por vosotros. Los hermanos entregarán a sus hermanos para que los maten, los padres a los hijos; se rebelarán los hijos contra sus padres, y los matarán. Todos os odiarán por mi nombre; el que persevere hasta el final se salvará. Cuando os persigan en una ciudad, huid a otra. Porque os aseguro que no terminaréis con las ciudades de Israel antes de que vuelva el Hijo del hombre».
Padre Martínez Cano, m.C.R.
* “La liturgia no es un juego de los Papas” (obispo Mutsoerts).
* La ideología de género es el marxismo en casa. La lucha de la mujer contra el hombre.
* “La Iglesia y los cristianos han de estar siempre en actitud de milicia en esta tierra… con afán salvadora de las almas” (Murialdo).
* “Santo Tomás de Aquino asegura que la santidad no es sino una resolución seria, un acto heroico del alma que se entrega a Dios” (Santa Teresa de Calcuta).
* La autoridad del Redentor abarca a todos los hombres; extensión bien declarada por nuestro predecesor, de inmortal memoria, León XIII, con las siguientes palabras que hacemos nuestras: “El poder de Cristo se extiende no sólo sobre los pueblos católicos y sobre aquellos que, por haber recibido el bautismo, pertenecen de derecho a la Iglesia”.
* Aunque el error los tenga esclavizados o el cisma los separe de la caridad, sino que comprende también a cuantos no participan de la fe cristiana, de tal manera que bajo la potestad de Jesús se halla todo el género humano”.
* Y en esta extensión universal del poder de Cristo no hay diferencia alguna entre los individuos y el Estado, porque los hombres están bajo la autoridad de Cristo tanto considerados individualmente como efectivamente en sociedad.